Recurso

El vínculo entre la AR y la obesidad

Los investigadores han descubierto que la obesidad en las mujeres puede tener un impacto en los resultados de los análisis de sangre utilizados para detectar la artritis reumatoide.

Imprimir

2017

Los investigadores han descubierto que la obesidad en las mujeres puede tener un impacto en los resultados de los análisis de sangre utilizados para detectar la artritis reumatoide. Los resultados mostrados en Arthritis Care & Research indican que es posible que los médicos deban considerar la obesidad como un factor al realizar las pruebas.

Los médicos utilizan los dos análisis de sangre: la proteína C reactiva (PCR) y la velocidad de sedimentación globular (ESR) para evaluar los niveles de inflamación en el cuerpo.

Ha habido cierta evidencia de vínculos entre niveles más altos de PCR y VSG con un índice de masa corporal más alto. Michael George MD MSCE, con sede en el Sistema de Salud de la Universidad de Pensilvania, y sus colegas trabajaron para determinar el alcance que tiene la obesidad en estos marcadores. El equipo estudió la información de más de 2.000 personas con artritis reumatoide y la comparó con estadísticas de la población general.

La evidencia ha demostrado que en mujeres con artritis reumatoide y en la población general, un IMC más alto se asoció con una PCR más alta. Este fue especialmente el caso entre las mujeres con obesidad severa. También hubo una conexión entre la obesidad y la VSG en las mujeres. La conexión entre ambos también se observó en hombres de la población general, pero la conexión entre obesidad e inflamación difirió en hombres con artritis reumatoide. En dichos individuos, un IMC más bajo se relacionó con una PCR y una VSG más altas. Este resultado puede ser importante para comprender la conexión entre el peso y la inflamación, y en qué puede ser diferente entre hombres y mujeres.

"Nuestros resultados sugieren que la obesidad puede provocar niveles elevados de PCR y VSG en mujeres con artritis reumatoide", dijo el Dr. George. “El aumento en estos niveles de inflamación no se debió a que la artritis reumatoide fuera peor en estas mujeres. De hecho, descubrimos que la obesidad provoca aumentos muy similares en estas pruebas de laboratorio incluso en mujeres sin artritis reumatoide”.

El Dr. George afirmó que los médicos deben tener cuidado al comprender las pruebas, ya que tanto la artritis reumatoide como la obesidad pueden contribuir a los niveles de inflamación. "Los médicos pueden suponer que los niveles altos de inflamación significan que un paciente tiene artritis reumatoide o que su artritis reumatoide requiere más tratamiento cuando, en realidad, un aumento leve en los niveles de inflamación podría deberse a la obesidad", explicó.