A diferencia de otros tipos de artritis, la artritis reumatoide (AR) es una enfermedad autoinmune que causa inflamación en las articulaciones y otras partes del cuerpo. Para ayudar a aliviar los síntomas, reducir el dolor y ralentizar el daño a las articulaciones, a menudo se utilizan medicamentos Sin embargo, no existe una solución única para el tratamiento de la artritis y lo que funciona para una persona puede no funcionar para otra. Aunque la medicación es el único tratamiento que ha demostrado ralentizar la progresión de la enfermedad, muchas personas también buscan terapias complementarias para ayudarlas a controlar los síntomas de la AR.
Estas terapias pueden ayudar a reducir la inflamación, aliviar el dolor, mejorar la función de las articulaciones y mejorar el bienestar general. A continuación, exploramos algunas de las diferentes terapias que puede probar para la artritis reumatoide junto con su tratamiento médico convencional.
Tratamiento y medicación comunes para la artritis reumatoide
Antes de sumergirte en terapias complementarias, es importante señalar que siempre debes seguir los consejos de tu equipo de reumatología. Tienen el conocimiento y la experiencia para crear un plan de tratamiento personalizado para usted, dependiendo de una variedad de factores que pueden cambiar con el tiempo. Se habrá demostrado científicamente que el medicamento que recomiendan ayuda a controlar los síntomas de la AR y se habrá sometido a pruebas rigurosas.
La medicación común incluye; Medicamento antiinflamatorio no esteroideo (AINE), fármaco antirreumático modificador de la enfermedad (FAME), un fármaco biológico o un medicamento biosimilar. A veces, también se utilizarán analgésicos y esteroides dentro de los planes de tratamiento de la artritis reumatoide. Si bien estos medicamentos son eficaces para controlar esta afección autoinmune, hay otras cosas que puede hacer para mejorar sus síntomas y su calidad de vida en general.
Actividad física y ejercicio
La actividad física puede ser realmente beneficiosa cuando se vive con artritis reumatoide. Hacer ejercicio puede ayudar a aliviar algunos de los síntomas que experimenta y también a mejorar su salud general. El ejercicio de bajo impacto, como nadar y caminar, puede ayudar a mantener las articulaciones flexibles y fortalecer los músculos alrededor de las articulaciones. Hay ejercicios que puede hacer sin importar cuán grave sea su AR y puede aumentar gradualmente la cantidad de ejercicio que realiza. Si no está seguro de por dónde empezar con un régimen de ejercicios, regístrese en nuestro programa de aprendizaje electrónico SMILE . Contamos con un módulo sobre 'Importancia de la Actividad Física y el Ejercicio'.
Dieta y Nutrición
Siempre es importante llevar una dieta sana y equilibrada, pero modificar la dieta puede ayudar a controlar la AR. Es importante intentar mantener un peso saludable, ya que el aumento de peso puede generar una mayor tensión en las articulaciones. Los alimentos que consume pueden ayudar a apoyar su cuerpo y también mejorar los síntomas. Por ejemplo, una dieta mediterránea puede ayudar a controlar la inflamación crónica. En NRAS, hemos recopilado mucha información sobre dieta y nutrición de la que existe evidencia de beneficios para las personas con AR.
Acupuntura
La acupuntura es una práctica de la medicina tradicional china que se ha vuelto cada vez más popular. Implica insertar pequeñas agujas en diferentes partes del cuerpo para estimular los nervios de los músculos. Se cree que esto estimula los analgésicos naturales, como las endorfinas, y aumenta el flujo sanguíneo, lo que potencialmente puede reducir la inflamación. Algunas personas con enfermedades crónicas y de larga duración encuentran útil la acupuntura para controlar el dolor y, en ocasiones, está disponible en el NHS.
Terapia de Masajes
La terapia de masaje también se puede usar junto con medicamentos para la artritis reumatoide para aliviar el dolor y la rigidez cotidianos y al mismo tiempo mejorar el rango de movimiento de las articulaciones. Si bien es posible que los masajes regulares no afecten su condición, el alivio del dolor a corto plazo que brindan puede facilitar algunas actividades diarias y mejorar su bienestar general. Es importante encontrar un terapeuta con experiencia trabajando con personas con AR para garantizar una experiencia segura.
Osteopatía y atención quiropráctica
Aunque son diferentes, tanto la osteopatía como la atención quiropráctica pueden ser beneficiosas para las personas que experimentan dolor en las articulaciones. Durante una cita, un profesional altamente capacitado utilizará manipulación física, estiramientos y masajes para reducir la tensión, mejorar la movilidad y aliviar el dolor. Se diseñará un plan de tratamiento con diferentes técnicas de terapia manual según sus circunstancias y necesidades únicas.
hidroterapia
Como se mencionó anteriormente, la natación es un ejercicio popular para las personas con artritis reumatoide y la hidroterapia también puede ayudar. Esto implica hacer ejercicio en una piscina de agua y puede ofrecer una variedad de beneficios. Dado que el agua soporta su peso, es un ejercicio de bajo impacto que no ejerce presión sobre las articulaciones, pero también proporciona resistencia que puede ayudar a mejorar la fuerza muscular. Si es nuevo en el ejercicio acuático, es beneficioso hablar primero con un reumatólogo.
Técnicas de Mindfulness y Manejo del Estrés
Vivir con AR puede afectar su salud mental y, desafortunadamente, el estrés a veces puede exacerbar los síntomas que experimenta. Las prácticas de atención plena y las técnicas de manejo del estrés, incluidas la meditación, el yoga y la respiración profunda, pueden resultar beneficiosas. Al centrarse en la conexión entre la mente y el cuerpo, pueden ayudar a reducir el estrés, aliviar el dolor y mejorar el bienestar mental. Es muy fácil incorporar el mindfulness a tu rutina diaria y no tienes nada que perder intentándolo.
Vivir con artritis reumatoide
No se puede negar que la medicación sigue siendo un componente clave del tratamiento de la AR y, aunque no existe cura para la AR, aún puede vivir una vida plena y activa cuando controle sus síntomas. Probar algunas terapias complementarias puede ofrecer beneficios adicionales al controlar la artritis reumatoide y ayudar a mejorar su calidad de vida en general.
Para estar seguro, es importante hablar sobre cualquier terapia complementaria que le interese con un profesional de la salud. Su equipo de reumatología puede incluso recomendarle otras opciones que complementarán su plan de tratamiento actual.
Si desea obtener más información sobre cómo vivir con AR, consulte el centro de recursos . Aquí encontrará una variedad de artículos, vídeos y herramientas útiles para hacer el día a día más manejable.